lunes, 6 de junio de 2011

Conferencia Historiador Enrique Florescano

LA FUNCIÓN SOCIAL DE LA HISTORIA
ENRIQUE FLORESCANO

El autor inicia este trabajo con la cita de Colling Wood “La historia es la disciplina del autoconocimiento humano….El valor de la historia consiste en que nos enseña lo que el hombre ha hecho y en este sentido lo que es el hombre.
Continua diciendo que la historia es un estudio de la indagación sobre el significado de la vida individual y colectiva de los seres humanos en el transcurso del tiempo.
Hace mención de diferentes enfoques e interpretaciones de autores sobre la Historia como los siguientes:
EL RELATO HISTÓRICO COMO DISCURSO DE IDENTIDAD.
Al conocer el pasado, podemos encontrar lo que en colectivo nos identifica como familia, comunidad pueblo y nación así como también la posesión de un territorio. Dotar a un pueblo de un pasado común y fundar en ese origen remoto una identidad colectiva, es quizá la más antigua y la más constante función social. El relato histórico establece una relación de parentesco con los antepasados próximos y lejanos.
LA HISTORIA Y EL CONOCIMIENTO DE LO EXTRAÑO Y REMOTO.
Para la historia la inmersión en el pasado es un encuentro con formas de vida distintas, y como esta tarea se practica con grupos y personas que ya no están presentes, es también un ejercicio de comprensión de lo extraño.
El oficio de historiador exige una curiosidad hacia el conocimiento del otro, una disposición para el asombro, una apertura a lo diferente y una práctica de la tolerancia.
LA HISTORIA Y EL REGISTRO DE LA TEMPORALIDAD.
La imaginación histórica se esfuerza por revivir lo que ha desaparecido. Los historiadores se empeñan en indagar lo que había, lo que no hay aquí, lo que había entonces lo que no hay ahora., es decir su objeto es el cambio de la vida social.
Para poder registrar los diferentes cambios y transformaciones sociales, ha desarrollado diferentes métodos para recabar e interpretar hechos, sucesos y acontecimientos.
Los seres humanos deben su carácter distintivo al hecho de compartir memorias sociales y sustentar valores heredados del pasado.

LA HISTORIA Y EL ENCUENTRO CON LO IRREPETIBLE E IMPERECEDERO.
A los hechos ocurridos en el pasado el historiador les confiere a esas experiencias una significación propia y un valor duradero singular e irrepetible dentro del desarrollo humano. Las experiencias individuales y los actos nacidos de la intimidad más recóndita se convierten en testimonios imperecederos, en huellas humanas que no envejecen ni pierden valor con el paso del tiempo.
EL ESTUDIO DEL PASADO COMO HISTORIA CONTEMPORÁNEA.
Benedetto Croce. Al observar que nuestra reflexión sobre el pasado está contaminada por los valores y preocupaciones del presente, sentencia que toda investigación sobre el pasado es siempre historia contemporánea. Con hechos y acontecimientos del pasado revivimos y justificamos el pasado. ¿Es la historia maestra de la vida?. Cuando aprendemos a conocer e interpretar el pasado somos capaces de asimilar la experiencia para no cometer errores en el presente y aunque hay dichos que dicen “si no aprendemos del logro y la derrota de los hechos y acontecimientos del pasado, la historia no tendrá sentido si no es que deje huella”.
LA HISTORIA COMO TRIBUNAL DEL PASADO.
Hay quien piensa que conociendo la historia, los acontecimientos y hechos pasados es suficiente para establecer juicios del pasado. Sobre esa opinión hay quienes advierten que el historiador no es un juez, ni le asisten razones morales para condenar a sus antepasados.
LA HISTORIA COMO RECONSTRUCCIÓN CRÍTICA DEL PASADO.
Cuando la historia se construye mas allá que una simple memoria y se analiza con métodos científicos para conocer la verdad sin que quede la duda, abre el espacio para la crítica y la interpretación con un sentido de análisis histórico de los hechos. A través del examen cuidadoso de los vestigios históricos, sometiendo los testimonios a pruebas rigurosas de veracidad y autenticidad, el relato histórico se constituye en un saber crítico. A pesar de la diversidad de enfoques los autores se han puesto de acuerdo en el objetivo principal de la historia que es la producción de conocimiento mediante el ejercicio de la explicación razonada.
ALGUNAS REGLAS BÁSICAS DEL OFICIO DE HISTORIADOR.
No cerrarles la puerta a los legados del Arte, las humanidades y el sentido común, ignorar a quienes encierran la historia con fuerza determinista y ortodoxa, vincular a la historia con todos los campos del conocimiento humano y combatir la fragmentación, dogmatismo y posturas anarquistas e inquisidoras.
Concluye que la historia es la búsqueda de los orígenes y espiritualidad del hombre.

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